¡Esta semana no lo logre! No pude estar 100% motivada, sentí que tenía mucha hambre diariamente, tuve mucha ansiedad de comer cosas grasosas, no quería ir a entrenar por simple pereza o fatiga pero poniendo como pretexto falta de tiempo, pero siempre fui a entrenar aunque no quería. Luego me puse a pensar en lo mal que me sentía cuando estaba viviendo una vida sedentaria y comiendo todo lo que se me cruzaba: Las papitas, las alitas, tres leches, pizza. Me pregunté , como podía ser tan tonta de no querer seguir si hace mucho no me sentía tan bien como ahora que como saludable y entreno. 

Hace mucho tiempo no me sentía con tanta energía y tan feliz (aunque normalmente soy malhumorada), lo hablé con una amiga y me hizo caer en cuenta que era normal tener una semana así, que era normal tener hambre, que era normal no querer ir a entrenar, porque simple y sencillamente yo había estado mucho tiempo haciendo literalmente nada, viviendo en mi zona de confort. Me propuse que de ahora en adelante los días que me sienta de esa manera voy a tomarme un poco de tiempo descansar un rato pero luego voy a levantarme y hacer lo que me toca.

Vivimos en una sociedad en la que vivir de la manera que yo lo estaba haciendo es normal, vivir con cansancio entre otras dolencias por la mala alimentación y soportar la baja autoestima por lo comentarios sobre mi sobrepeso son totalmente normales.

 En Honduras el 52% de la población tiene sobrepeso y el 20% sufre de obesidad. Las baleadas y el pastel son muy ricos hasta que empiezan a doler la espalda y las rodillas por las libritas de más o  vas al doctor y te dicen que sos pre-diabético. Yo los entiendo porque prefiero unas papas fritas con queso a una ensalada con pollo a la plancha, pero también es necesario entender que la salud no es un juego, que tu cuerpo necesita estar bien cuidado, que aunque no vayas al gimnasio, es mejor subir las gradas que irte por el elevador porque ese tipo de pequeños cambios pueden hacer la diferencia en tu manera de vivir.

Yo vivo a diario con mi sobrepeso y no me siento orgullosa de eso, mi autoestima no es tan buena como me gustaría porque vivía con el estereotipo que solo la gente delgada es bonita pero estoy trabajando en eso y ahora sé que eso no es cierto. Yo decidí hacer un cambio en mi vida no por lo que la gente decía de mi apariencia, si no por mi salud, por mi bienestar. He decidido entrenar diariamente en el gimnasio por las mañanas, planear mis comidas saludables semanalmente, para no solo comer pollo con ensalada así también voy a poder descubrir mis habilidades culinarias ocultas, voy a estar practicando con los videos de recetas saludables que encuentro en internet porque sé que puedo y debo cambiar. Si tenes sobrepeso o sufrís de obesidad solo te pido que pongas en perspectiva tu vida, evalues si realmente estás viviendo tu vida feliz y plenamente, si no es así espero empeces a hacer un cambio porque al final del día tener cualquiera de los dos es tu culpa, pero también es tu decisión y responsabilidad cambiarlo.